Aprender a soltar
Adoptando una actitud adecuada para la cura.
Adoptando una actitud adecuada para la cura.
Lo primero que le aconsejo a cualquier persona que esté sufriendo de acúfenos o tinnitus, es adoptar una actitud mental adecuada para comenzar a curarse.
Cuando yo comencé a sufrir de este problema, uno de los primeros médicos que visité me dijo: "nada de lo que usted haga le dará resultado, si no baja varios cambios en su rutina diaria"
Y se me hizo un click...
Yo estaba viviendo para trabajar, en lugar de trabajar para vivir.
Además, me costaba soltar a personas que no ayudaban en nada a mi tranquilidad. Personas tóxicas, que con sólo conversar con ellas ya me ponían nervioso. Tampoco tenía una rutina para combatir el stréss, había dejado de caminar diariamente y había dejado de practicar hobbies que me relajaban, como el avistaje de aves y la pesca. Incluso había dejado de leer, otra actividad que también me relaja. Sólo trabajaba.
Lo primero que hice fue organizar mi negocio para poder tomarme un año sabático. Sé que muchos no podrán hacer esto, pero podrían adelantar unas vacaciones, o negociar un horario reducido en sus trabajos temporalmente. También puede suceder que la fuente de su nerviosismo no sea lo laboral, sino ciertas relaciones familiares o amorosas. O la falta de ellas. "Cada uno sabe dónde le aprieta el zapato", dice un refrán.
Atención: no quiero decir con esto que el origen del tinnitus sea psicológico. El origen es físico, se trata de un sonido real, aunque sólo uno pueda escucharlo. Pero tanto en este trastorno como en mucho otros (presión arterial, dolor de espalda y cuello, tics nerviosos, dolores de cabeza, temblores,diabetes, problemas cardíacos, insomnio, etc. ) lo psíquico juega un papel preponderante.
Tanto en su origen, como en el aumento o disminución.
No importa cuán fuerte sea la intensidad del sonido. Debe tener presente en todo momento que se trata de algo temporal, y que en otro momento estará mejor. Sé que cuesta pensar así. Lo entiendo. Pero aquí se encuentra ante el primer desafío del tratamiento : tener presente siempre, que ese sonido es temporal. Y que en otro momento, u otro día, se sentirá mucho mejor, ya sea porque el sonido bajó en intensidad, o porque desapareció.
Cuando comencé a sufrir de tinnitus, el sonido era tan fuerte que me resultaba casi imposible dormir. Me despertaba cada media hora, y el tiempo neto por noche en que podía dormir con suerte llegaba a las 3 horas. Así por dos meses seguidos. Ojalá yo hubiera tenido a mano desde un principio este Método Z.
No había día ni noche en que no pensara por unos momentos en quitarme la vida.
Cuando le comenté al médico de cabecera que pensaba en suicidarme, quiso derivarme a un psiquiatra, pero me rehusé. Siempre estuve en contra de la psiquiatría, principalmente porque nunca en mi vida conocí a alquien que la psiquiatría lo haya ayudado a mejorar. Todo lo contrario, o empeoraban, o terminaban en suicidio. (ver https://www.youtube.com/watch?v=CEotPgZpxJA )
Me refugié en la fe. Sabía que Dios me ayudaría, y así fue como uno de mis mejores amigos, que en un tiempo había sido el pastor de mi Iglesia, me recomendó hacer gimnasia yoga.
Siempre le estaré agradecido a mi amigo Cristian por brindarme el consejo oportuno en el momento oportuno.
Cada vez que hacía yoga, tenía la sensación de que iba por buen camino. Aun cuando no sentía alivio inmediato al tinnitus, pero algo dentro de mí me decía que debía perseverar en los ejercicios. Como todo lo natural, sus efectos tomaron un tiempo. Tomaron meses. Ayudados también por una alimentación sana, cambio de hábitos, y una vida más relajada.
Otro factor que ayudó en mi recuperación fue la medicina biológica, al cual le dedico un artículo aparte en la sesión de usuarios registrados.
En resumen, lo que deseo trasmitir al que sufre de tinnitus, es que debe quitarse la idea de que el sonido que escucha es una amenaza. Debe saber que eso lo aqueja temporalmente, y que se trata de una alarma , que lo está llamando a realizar cambios en su vida, a fin de vivir más relajado y feliz.
El tinnitus no es una enfermedad en sí misma, es un síntoma de que algo no anda bien en el organismo, y no debe intentar taparlo con psicotrópicos ni barbitúricos. La propuesta del método Z es 100% natural. Apunta a las causas, que pueden ser una o varias, siguiendo un criterio de tomar medidas para cada una de las posibles causas del acúfeno o tinnitus.
Y siempre dentro de lo natural.
Otra cosa que tuve que soltar, fue la medicación que venía tomando contra la presión arterial alta. A pesar de que el médico me sugirió soltarla de a poco, yo dejé de tomarla de golpe, y no volví a tomar un antihipertensivo hasta el día de hoy. De esa forma eliminé una de las posibles causas del tinnitus: los antihipertensivos. Hay todo un negocio detrás de los antihipertensivos. Casi ningún médico le advierte a uno que la presión alta puede venir por la falta de potasio en la dieta. Y más de un cardiólogo me mintió diciéndome que aunque baje de peso , seguiría siendo hipertenso. No quiero decir aquí que todo el mundo debiera dejar de tomar su medicamente para la presión, sino que, en muchos casos, son totalmente innecesarios.
También solté la cafeína, cosa que ninguno de los varios cardiólogos que visité me había recomedado. Me enteré googleando lo mal que hace la cafeína a la presión arterial.
Solté el hábito de fumar tabaco en pipa, algo que proporcionaba un placer totalmente prescindible. Tiré todas las pipas y el tabaco.
Solté la costumbre de tomar una vaso de vino en cada comida.
En fin, a veces, no se trata de una sola cosa, sino la combinación de varias las que nos llevan a un estado de falta de salud y desemboca en algo tan tormentoso como el tinnitus.
Pero ánimo. El tinnitus tiene cura.
Todavía me suelo sorprender a mí mismo cuando recuerdo lo mal que estuve y pienso en lo bien que estoy ahora. Y porque quiero ayudar a otras personas, es que lancé este método a través de la web.
En Resumen:
Comience por SOLTAR todo aquello que lo altera.
Adopte una actitud tranquila ante la vida. Busque la compañía de personas que lo hagan sentir bien, y apártese de las personas tóxicas.
Como en la imagen que ilustra este consejo, suelte lo que lo pone mal con la misma gracia con que se suelta un ave y la misma remonta vuelo hasta alejarse de nosotros y la perdemos de vista.
Si hay algo bueno que podrá obtener de todo esto, es el de adoptar un gran cambio en su actitud ante la vida.