Buenos tips para los peores momentos
La almohadilla de gel que ven en la foto es la que me quedó
de recuerdo de cuando la usaba cuando sentía que me estallaba la cabeza por el sonido.
Por eso está tan arrugada. Las almohadillas de gel frío-calor se venden en
cualquier farmacia. Se pueden calentar en agua caliente o en el microondas.
Otra opción es la amohadilla térmica eléctrica, aunque yo siempre les tuve
cierto temor de que fallen, y como la idea es relajarse, mejor no usar nada que
nos ponga nerviosos.
Con la almohadilla a buena temperatura de tibia a caliente, nos la colocamos en
la nuca, arriba de la cabeza y en los oídos, variando la posición según nos calme mejor. Podemos usarla sentados o acostados.
Luego, elegimos uno
de los ruidos blancos que hemos descargado de nuestra sección de miembros
registrados en el Método Z. Elegir el que mejor “tape” el sonido interno, en el
volumen suficiente como para eclipsar el tinnitus lo mejor que se pueda.
NO tomar ningún psicofármaco de los que recetan los
psiquiatras. Nunca.
Debés mentalizarte que “esto también pasará” . Y enfocarte en que es algo transitorio,
aunque cueste. Es común que los afectados de tinnitus tomen al sonido como una “amenaza”.
Y esa percepción hay que abandonarla. No es una amenaza.. Al contrario, es una “alarma”
de que debemos realizar cambios drásticos en nuestro estilo de vida, y comenzar
a vivir más relajados. Quizá el tinnitus nos esté salvando de un ACV o de un infarto,
de los cuales no se podrían volver.
También es común, en esos momentos críticos, sentirse
incapaz de realizar una tarea cualquiera, especialmente laboral. Cuando eso
sucede, es porque el trabajo que tenemos nos está proporcionando una fuerte
carga de stress, y debemos tomarnos unos días de descanso sin pensar para nada
en el mismo.
Si el stress proviene del entorno familiar, o de una
relación sentimental, también, tomarnos un “descanso” y apartarnos de lo que
nos está minando la salud.
Es necesario que hagas un paréntesis de tus rutinas, y te
dediques sólo a vos.
La reflexología (masaje de pies realizado por reflexólogos matriculados)
y los masajes, especialmente los masajes
craneales, también pueden ayudar a sobrellevar
mejor los peores días. Yo también solía ir a lo de mi peluquera solamente para
que me lave la cabeza, los masajes del lavado con el agua tibia me ayudaban
bastante.
Otros tips: un baño de agua tibia, si es de inmersión mejor,
prender un sahumerio, caminar descalzo,
respirar aire fresco, tomar sol, son tips que variando de persona a persona van
a colaborar a bajar el nivel de tensión y ansiedad. Todo esto se llama “relajación
consciente” , y es la oportunidad de comenzar a practicarla. No pienses en el
sonido, sé que podría parecer imposible, pero bien vale la pena el intento.
Pensá en otras cosas, siempre que sean agradables, y te aseguro que siguiendo todas
las recomendaciones del Método Z vas a estar cada vez mejor y mejor.